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¿Cómo se maneja el presupuesto en una empresa?

¿Se puede aplicar lo mismo a un tema más micro, como el presupuesto particular?

Para los gerentes financieros de las empresas el presupuesto se puede resumir en tres puntos básicos: hay que contar con una estimación de la evolución macroeconómica del país, una proyección realista de las ventas y un fuerte seguimiento mes a mes del cumplimiento del plan de negocios.

Por eso, de la misma manera que ningún gobierno o empresa puede sobrevivir sin un presupuesto, una persona o familia tampoco puede progresar sin un orden en sus finanzas personales.

Si bien no existe una fórmula aplicable a todos por igual, veamos cómo se puede aplicar los puntos que utilizan las empresas diariamente, en la economía personal y hogareña.

1 - Evolución de la economía de tu país. Ya sea que nuestro país esté en la senda de crecimiento o, que por el contrario, reafirme su rumbo recesivo, hay que estar atento a esto, porque nadie está libre de los problemas económicos que afectan al país en donde se vive.

¿Cuánto creció Argentina este primer semestre y cuanto lo hará el próximo, ¿Cómo estará el tipo de cambio? ¿De cuanto será la inflación?, ¿Cuál es el nivel de desempleo?.

2 - Proyección realista de ingresos y egresos. Para este punto hay que ser lo más exigente posible. No incluir ninguna ganancia extraordinaria, ni quitar ingresos que sean estables. Hay que anotar detalladamente cuáles serán los ingresos y gastos anuales.

Después, verificar que esa cuenta permita como mínimo un ahorro del 20% que nos permitirá ingresos extras para poder invertir. Si los números no cierran, hay que ajustar el lápiz.

3 - Seguimiento del presupuesto pautado. Lo más fácil es armar una planilla en el Excel que servirá para un buen control mensual o algunos de los programas que ya existen para esto.

Sin embargo, y por mas control que se haga, la subjetividad es lo que cuenta, porque la falta de tiempo, los caprichos, y las tarjetas de crédito, pueden hacer estragos. Por eso, a la hora de sincerar números -sean de la macro o la microeconomía- no hay que poner ninguna clase de excusa, y actuar con decisión.

Este tipo de planificaciones, puede darle a cada uno lo que necesita en materia financiera: seguridad, educación y bienestar.

Es hora de ponerlo en practica.